Si la industria del café a nivel mundial posee la dimensión que posee, obviamente es porque que se trata de un producto muy consumido y extendido en todos los ámbitos y a todos los niveles. Desde la óptica del trabajo la asociación entre el café y las pausas, o el café en los momentos de necesidad de mayor esfuerzo es notoria. Sin embargo,¿se imagina usted en qué profesiones se consume más café?.
Según un estudio realizado por Pressat a nivel internacional, casi se podría decir que los hábitos de consumo de café pueden ayudar a definir la clase de trabajo que una persona realiza. Obviamente esto es mucho decir, pero, viendo el resultado del estudio, lo cierto es que parece más convincente.
El estudio se ha realizado alrededor de 10,000 personas. De ellas el 85% admitía consumir al menos tres tazas de café diarias. El reparto del consumo resulta muy clásico, prácticamente el total de los encuestados asocia el primer café a los primeros momentos del día para ponerse en marcha. Sin embargo, un dato llama poderosamente la atención, casi para el 70% de los encuestados el consumo de café tienen una relación muy fuerte con la capacidad para trabajar. Por otro lado, por géneros, los hombres beben más café que las mujeres, sin embargo, es una diferencia inapreciable, ya que supone sólo un escaso 5% más.
El consumo de café se asocia de manera directa con muchos trabajos concretos, pero, el gran consumidor, aquel que supera más de cuatro tazas diarias, presenta perfiles medios muy concretos que responden a carreras profesionales con mayores niveles de estrés; periodistas, policías y maestros. profesiones en las que parece se utiliza el café para ese impulso y plus de energía a lo largo del día.
Por otro lado, y de manera complementaria, un estudio realizado en la Universidad de Carolina del Sur concluye que cualquier consumo que supere los 200 mg diarios de café es excesivo para la salud; traducido en tazas, cuatro tazas pequeñas (o dos tazones). La cafeína funciona como un estimulante adictivo leve, esto impulsa a mantener e incluso aumentar el consumo para lograr el efecto que se desea o que el cuerpo solicita; posee efectos sobre la salud cardiovascular como el aumento de la presión arterial y la inducción a la arritmia en caso de un exceso de consumo.
Lo verdaderamente notable, volviendo al primero de los estudios, es que el 62% de los encuestados manifestaba desconocer que beber mucho café pudiera aportar repercusiones negativas para su salud. Dicho esto, el consumo de café dentro de los límites antes citados y si no existen problemas que lo contraindiquen, no tiene por qué ser una preocupación, además de aportar algunos beneficios como, efectivamente, la mejora de la función cognitiva transitoria ya que es precisamente donde la cafeína ayuda. No es un producto para el exceso pero, en condiciones normales, puede ser un estimulante no excesivamente nocivo en comparación a otros.
¿Y uasted cuánto café toma?
Falta la de administrador de sistemas
Y el de catador de café?