A la hora de promocionar los servicios de una empresa es imprescindible contar con una buena presentación que ofrezca nuestra mejor cara. Ya sea una pyme, micropyme o un trabajador autónomo no hay excusa para no contar con un buen dossier empresarial en el que se refleje quiénes somos y qué hacemos.
Incluso a las empresas más privilegiadas les llega un momento en el que deben salir a vender y buscar clientes. Y es momento es en el que deben de contar con una buena presentación como aliada para enviar o dejar a los clientes.
¿QUÉ ES UNA PRESENTACIÓN DE EMPRESA?
Es un dossier, generalmente realizado en algún programa de ordenador tipo ‘power point’ en el que aparecen reflejados de forma resumida y atractiva. Puede enviarse por correo electrónico o imprimirse para dejar a los clientes que se visiten.
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¿QUÉ DEBE CONTENER?
- Una presentación de la empresa: quiénes somos, desde hace cuanto tiempo estamos abiertos, quiénes conforman el equipo, cuáles son nuestras líneas de negocio
- Nuestros servicios: Es importante especificar los diferentes servicios que se ofrece al cliente. No se trata de mostrar un catálogo de productos sino de detallar qué pueden encontrar los clientes que acudan a nosotros.
- Nuestros clientes: si se cuenta con una cartera de clientes destacada o aunque sea alguno importante, es recomendable citar algunos de ellos en la presentación, ya que siempre aportará mayor confianza y credibilidad sobre la calidad de nuestro trabajo.
- Contacto: Hay que especificar la dirección de la empresa y el nombre y teléfono de la persona de contacto. En este sentido es importante señalar más de una persona y nombre por si ese empleado abandona la compañía en algún momento. Así, se puede también recurrir a poner un email genérico de contacto y el número fijo de la oficina además del móvil. Es recomendable incluir los perfiles en redes sociales y la página web.
¿CÓMO DEBE ESTAR DISEÑADA?
La presentación debe ser atractiva. Aunque no se tengan conocimientos de diseño, no hay excusa para no tener una presentación realizada con gusto. Lo mejor es utilizar una plantilla predefinida y adaptarla a la imagen de la empresa.
La presentación debe contar con el logo y estar en sintonía con la imagen corporativa de la compañía, sobre todo en lo que a colores y tipografía se refiere. Todo material que se utilice debe ayudar a hacer marca.
Hoy en día, cada vez son más las empresas que apuestan por la originalidad a la hora de dar a conocer sus servicios. En este sentido, el vídeo se está convirtiendo en el elemento estrella. Breves, directos y con mensajes emocionales suelen impactar directamente en la retina de los usuarios, aunque eso sí, su precio es elevado.