La situación de desaceleración que sobrevuela el país tiene como máximos perjudicados a los autónomos que están más desprotegidos que el resto de las empresas del país. En ese sentido, el 55,7% de los trabajadores autónomos manifiesta que su plantilla se ha mantenido en idénticas condiciones, incluso para un 6,5% ha aumentado ligeramente. Otro porcentaje, a tener en cuenta, 33,9%, afirma que ha disminuido su plantilla de trabajadores.
Así, uno de cada cuatro autónomos encuestados manifiesta que necesita contratar a nuevos trabajadores; si bien, el 70% añade que no va a poder hacerlo por problemas económicos. Para ese 70% estaría bien visto, que el Gobierno contemple bonificaciones o deducciones en la cuota de la Seguridad Social o ayudas directas a la contratación.
La intención de contratar a nuevos trabajadores está latente, pues prácticamente uno de cada cuatro responde positivamente. El 4,3% tiene la intención y puede hacerlo y un 18% querría, pero económicamente le resulta imposible.
El 45,4% de los autónomos estima que si tuviesen una ayuda directa o a través de deducciones en cotizaciones sociales, de 10.000€, para contratar a un trabajador por 3 años lo haría, frente a algo más del 40% que no lo haría, ni con esta medida.
Es por ello que la falta de financiación es uno de los principales problemas de los autónomos y es algo imprescindible para poder mantener su negocio en 2009. Este hecho preocupa bastante, pues casi un 68% manifiesta tener serias dificultades para acceder a una línea de crédito, ampliarla o renovarla.
Dentro del paquete de medidas más valorado por los autónomos las mejor aceptadas son la reducción de impuestos (61,3%), la bonificación o reducción de cuotas a la seguridad social (47,6%), la prestación por cese de actividad (40,4%), el pago de facturas antes de 30 días (37,1%), el acceso al crédito y la financiación (35,5%) y ayudas a la contratación (25,2%).