La Federación Nacional de Autónomos, ATA, y Fraternidad Muprespa presentan un informe sobre la siniestralidad laboral de los autónomos.
De este informe se desprende que a septiembre de 2008, en términos absolutos, 535.365 trabajadores autónomos estaban protegidos en contingencias profesionales, lo que traducido a términos relativos supone un 15,9%.
Por comunidades autónomas, en el periodo estudiado, el informe pone de manifiesto cómo de los 535.365 autónomos protegidos por contingencias comunes, Andalucía (19,7%), Madrid (11,0%), Cataluña (10,6%), Galicia (10,0%) y Valencia (9,5%), registran los mayores porcentajes de altas en contingencias profesionales; acaparando un 60,8%. En el otro extremo se sitúan La Rioja (1,1%), Cantabria (1,6%), Navarra (1,7%) y Baleares (2,0%).
Por su parte, el índice de la incidencia de siniestralidad de los trabajadores por cuenta propia a diciembre de 2008 era del 21,15/mil, mientras que el índice de siniestralidad total del sistema, alcanzaba el 57,09/mil, tasa que prácticamente triplica la de los trabajadores autónomos.
No deja de ser representativo que la media de los días de duración de los procesos de baja anuales que ofrecen los trabajadores por cuenta propia (38,26) frente a los asalariados (25,39), debido a que cuando un autónomo se acoge a una baja laboral es porque su situación corresponde a lesiones que requieren de una terapia específica y prolongada.
Respecto a la gravedad de la lesión en la jornada de trabajo dentro del colectivo de autónomos, un 96,07% obedece a cuestiones leves, el 3,69% a situaciones graves, y únicamente un 0,25% son mortales.